El compliance y el blockchain son claves para fortalecer la transparencia y combatir la corrupción.
La corrupción sigue siendo uno de los mayores retos que enfrenta Colombia en su desarrollo social y económico. Según Transparencia por Colombia, las prácticas corruptas más frecuentes se concentran en los ámbitos administrativo y político, con un impacto significativo en la contratación pública[1], considerando las estrechas relaciones entre funcionarios públicos y empresas, y la participación de terceros convierten a la contratación pública en uno de los principales focos de corrupción dentro del sector público. Esta problemática exige medidas de prevención, control y monitoreo; pues cuando se realmente hay transparencia en los procesos, se elimina el espacio para prácticas corruptas.
De ahí a que el Compliance haya emergido para combatir esta y otras problemáticas a través de sistemas de gestión de riesgo y programas de cumplimiento. Busca fortalecer la transparencia y la rendición de cuentas tanto en el sector público como en el privado. Esto se logra a través de la implementación de normativas y políticas claras que previenen actos de corrupción, promoviendo una cultura de integridad y cumplimiento de la ley. En el sector público, el compliance refuerza la confianza en las instituciones gubernamentales, asegurando que los recursos públicos se gestionen de manera adecuada y conforme a los principios de legalidad y ética. En el ámbito privado, impulsa la creación de sistemas internos de control robustos que permiten identificar y mitigar riesgos de corrupción.
Pero al hablar de transparencia hay que hablar de Blockchain. En distintas jurisidicciones se ha identificado la tecnología de Blockchain como un aliado estratégico para la transparencia como forma de prevención de corrupción. Se basa en un sistema de registros distribuidos que recopila información de manera segura a través de una red peer-to-peer (de igual a igual) sin necesidad de intermediarios[2]. Este enfoque ofrece trazabilidad y la inmutabilidad de los datos, aportando: compromiso, coordinación y control en distintas clases de procesos.
En Colombia, ha habido gestión por parte del MINTIC para su implementación con proyectos orientados a reducir el riesgo de corrupción o manipulación de información.[3] Sin embargo, no existe un marco regulatorio específico que considere sus características valiosas y regule otros asuntos implicados, como la protección de datos personales. De superar estas barreras legales, habría mayor seguridad jurídica para implementar el Blockchain en Colombia como aliado estratégico del Compliance en nuestra histórica lucha contra la corrupción.
[1] Transparencia por Colombia. Comunicado 3-2024: https://transparenciacolombia.org.co/colombia-mejora-ipc-2023/
[2] SAP. Blockchain explicado desde una perspectiva empresarial https://www.sap.com/latinamerica/insights/what-is-blockchain.html
[3] Narváez M. H. Carrasquilla-Díaz L. De Luque-Pisciotti A. Guarin A. F. Barrios T. A. Gallego-Nicholls J. F. (2022). Legal challenges for Blockchain implementation in Colombia.Procedia Computer Science, 210, 323–327. 10.1016/j.procs.2022.10.158