“(…) cabe resaltar que es la primera vez en la historia que para las entidades públicas de servicios financieros se expide una medida de gobierno corporativo de tal naturaleza. Si bien no es propiamente una medida de codeterminación (…) sí refleja la visión que el Gobierno Nacional tiene sobre el manejo de las empresas estatales, donde se pasa de una supremacía del accionista a una tímida, pero al fin y al cabo priorización, de los principales grupos de interés de las empresas: los trabajadores.”
Los actores corporativos que ostentan el poder de fijar las directrices económicas, laborales y, en fin, estratégicas de las principales compañías abiertas y cerradas en Alemania son los representantes de los accionistas y los trabajadores de las empresas. La ley de Codeterminación de 1976 (Mitbestimmungsgesetz) expedida por el Bundestag, dispuso que las juntas directivas (Aufsichtsrat) de las empresas germanas con 2.000 o más trabajadores, deben estar compuestas, de manera paritaria, por los designados por los accionistas y los elegidos por los trabajadores. Es así como en el gobierno corporativo (Unternehmensführung) de sociedades comerciales como Volkswagen AG o BMW AG, se encuentra que hacen parte de la junta directiva 20 personas designadas de la manera indicada.
Sobre los impactos positivos o negativos de la codeterminación para las compañías y para los trabajadores, algunos estudios basados en evidencia sugieren que esta institución tiene impactos neutrales o en ocasiones levemente positivos[1]. Por ejemplo, del lado de los trabajadores, la implementación de la codeterminación en una determinada empresa resultó en un incremento de 0 a 1.5% en los salarios. Por el lado de las empresas, la evidencia sugiere que tiene un impacto positivo cercano a cero.
Fue en este marco que el Gobierno Nacional expidió el decreto ley 1962 de 2023, que tiene como propósito homogeneizar la gobernanza de las entidades públicas de servicios financieros. En ese decreto se estableció que un renglón de la junta directiva corresponde “a los empleados de la respectiva entidad”.
Sobre lo anterior, cabe resaltar que es la primera vez en la historia que para las entidades públicas de servicios financieros se expide una medida de gobierno corporativo de tal naturaleza. Si bien no es propiamente una medida de codeterminación, dado que, según la literatura citada esta se da cuando un 30% al 50% de la junta está compuesto por los trabajadores, sí refleja la visión que el Gobierno Nacional tiene sobre el manejo de las empresas estatales, donde se pasa de una supremacía del accionista a una tímida, pero al fin y al cabo priorización, de los principales grupos de interés de las empresas: los trabajadores.
Los impactos de esta medida requerirán evaluación con el tiempo, tarea que corresponde tanto a las empresas como al Gobierno Nacional. Por otra parte, debe aclararse que, bajo la legislación societaria actual, ese trabajador y administrador societario que hará parte de la junta directiva de las empresas estatales a las que aplicó la medida, no es un representante de los trabajadores en dicho órgano social, sino que sus deberes son con la compañía.
[1] Jäger, Simon, Shakked Noy, and Benjamin Schoefer. «What does codetermination do?» ILR Review 75.4 (2022): 857-890.
Excelente información.