Iniciando el 2024, es crucial tener en cuenta las tendencias de ESG que se advierten para este 2024.
Los criterios ESG – Environmental, Social and Governance- (o por sus siglas en español ASG: Ambiental, Social y Gobernanza) son parámetros que permiten definir y medir el impacto ambiental, la gestión social y la calidad de gobernanza corporativa de las compañías.
Los tres criterios que componen los “ESG” abordan aspectos específicos:
(i) El criterio ambiental: busca que las empresas reduzcan su impacto ambiental, fomentando una economía verde e implementando los Objetivos de Desarrollo Sostenible (“ODS”) como agua limpia, uso de energía limpia y acciones por el clima.
(ii) El criterio social: se centra en mejorar la calidad de vida de los stakeholders de la empresa, promoviendo los ODS como igualdad de género, fin de la pobreza, salud y trabajo digno.
(iii) El criterio de gobernanza: está dirigido hacia una gestión eficiente y a la transparencia corporativa, relacionándose con los ODS como crecimiento económico, instituciones sólidas y alianzas.
Además, los criterios ESG se alinean con la idea de que las empresas no solo deben obtener utilidades para sus accionistas, sino que también deben procurar promover la sostenibilidad e impactar positivamente en su entorno. Para medir dichos criterios, se ha creado estándares y marcos de referencia como SASB, GRI, IR y TCFD[1], los cuales miden dicha información no financiera y otorgan un puntaje a las compañías.
La implementación de estos criterios ha experimentado un auge en las empresas colombianas, impulsado también por que fomenta la atracción de nuevos inversionistas y reduce riesgos legales. Tanto así que un informe de EY del 2023 evidencia que “Colombia, México y Costa Rica son los países más avanzados en la región, gracias a las políticas públicas locales, los compromisos internacionales que han adquirido y la presión de los socios comerciales con operaciones en países donde tienen requerimientos de sostenibilidad más estrictos”[2] . A pesar de este avance, el país aún tiene un camino por recorrer en comparación con Estados Unidos y Europa.
Ahora bien, iniciando el 2024 es crucial tener en cuenta las tendencias frente a los criterios ESG que se advierten para este año[3]. Hay varios aspectos que las empresas deberán tomar en consideración, pero se pueden resaltar tres aspectos en particular.
Primero, considero clave destacar la inteligencia artificial (IA) como aliado de la sostenibilidad. Efectivamente, la IA se volvió de las herramientas tecnológicas más utilizadas este 2023, y, por lo tanto, es momento de implementarla en los criterios ESG. Para el criterio ambiental, la IA puede convertirse en un recurso para idear estrategias ambientales y prevenir fenómenos climáticos que afecten las compañías. Para la gestión social, se podrá utilizar la IA en ampliar la educación de los trabajadores, reducir tiempos de trabajo y mejorar la eficiencia de los equipos. En factores de gobierno corporativo, se podrá implementar para hacer monitoreo y gestión eficiente de la empresa.
Otra tendencia será la integración de personal calificado y experto en materia ESG dentro de los organigramas corporativos. Seguramente a futuro la formación en estos criterios se convertirá en un factor diferenciador para las empresas a la hora de contratar nuevos empleados. Este panorama ofrece una oportunidad para las instituciones educativas, ya que es probable que aumente la demanda de planes de estudios que incluyan los principios de ESG en su pénsum.
Por último, en criterios ESG, se resalta la tendencia de aumentar la financiación y el apoyo de proyectos de conservación y restauración de la naturaleza. Es una realidad que el cambio climático ya no es tan intangible como lo era antes, evidenciándose un notorio aumento en catástrofes naturales y fenómenos meteorológicos. Es por esto que las compañías colombianas deberán adoptar un rol más activo en torno a las medidas de protección al cambio climático, no solo en beneficio del planeta, sino también al ser un factor que el mercado y los inversionistas extranjeros empiezan a ponderar a la hora de tomar decisiones de consumo e inversión.
[1] Sustainability Accounting Standards Board (SASB), Global Reporting Initiative (GRI), Integrated Reporting (IR) y Task Force on Climate-Related Financial Disclosures (TCFD).
[2] https://www.ey.com/es_co/sustainability/panorama-de-las-empresas-en-latinoamerica-sobre-esg
[3] Fuente: informe “Tendencias ESG 2024” de Fonética https://foretica.org/wp-content/uploads/2024/01/Tendencias-ESG-2024_Foretica.pdf
Sofía García-Reyes Meyer es Abogada de la Pontificia Universidad Javeriana, desempeña actualmente el cargo de Asociada en Dentons Cárdenas & Cárdenas.
Anteriormente, ejerció como Consultora Junior en UpWyse y también ha ocupado el rol de Directora y Miembro del Consejo Editorial en el periódico Foro Javeriano. Sofía también ha contribuido como Practicante en la Fundación ProBono Colombia.